Un vínculo histórico con los Incas, minas de oro y la devoción a la Virgen. Desde tiempos prehispánicos hasta la actualidad, la extracción de minerales ha sido el sustento económico de esta tierra. Sus vestigios arqueológicos revelan una rica historia que se remonta a miles de años atrás.
La Historia de Andacollo está unida a la invasión de los Incas que se llevó a cabo mucho antes que los españoles conquistaron nuestro país. Los indios lavaban oro y la producción obtenida era enviada a los Incas. La imagen de la Virgen habría sido traída a Chile por los españoles al fundar la ciudad de La Serena en 1544. Cinco años más tarde esta ciudad fue incendiada por los indios. Algunos españoles lograron escapar con la imagen de la Virgen del Rosario hacia las montañas donde la escondieron, luego aproximadamente en el año 1560, un indio encontró la pequeña imagen de madera toscamente labrada, de tez morena. No se sabe con certeza como ocurrió el hallazgo. Unos dicen que fue mientras cortaba leña, otros que fue mientras buscaba mineral, entonces la imagen de la virgen dice con voz celestial: “Anda Collo y dile a tu pueblo que me encontraste”, desde ese momento comienza el culto y la devoción hacia la virgen. Orígenes de Andacollo: Desde tiempos prehispánicos desde las entrañas de la tierra de Andacollo y a través de sus lavaderos de oro se ha extraído oro, plata y cobre, mineral preciado que en la actualidad es el sustento económico de esta zona. Según investigaciones arqueológicas realizadas la ocupación humana en este territorio Andacollino se inicia desde hace varios milenios, probablemente unos 10.000 años atrás, se han encontrado evidencias ancestrales que se inician con los cazadores recolectores trashumantes desde 8.000 AC. En esta zona se encuentran vestigios rupestres, tanto en pictografía como petroglifos, trozos de cerámicos, artefactos líticos (puntas de flechas), que señalan la interacción o transición arcaica (cazadores) con la cultura Molle, indígenas que habitaba entre el Río Copiapó hasta el Río Choapa. Estos vestigios indican que Andacollo sería el punto ideal para el intercambio de especies con los aborígenes que habitaban en el Valle de Elqui y la Costa. Las tierras eran aptas para el cultivo del maíz, el poroto y el zapallo, además de la crianza de ganado entre ellos llamas, alpacas y vicuñas; finalmente, a los Molles se les atribuye conocimientos metalúrgicos en cobre. En conclusión Andacollo presenta evidencias de diferentes periodos, desde el Arcaico Temprano hasta el Agro alfarero. Desde el año 1420, Chile es punto de dominación hasta el Maule, por una de las más grandes civilizaciones de América, Los Incas. Andacollo, según historiadores, se funda como colonia minera, de ahí que su nombre tenga origen quechua, Anta-Coya: anta (oro-metal-tierra); Coya (reina emperatriz). Es decir “Reina de la tierra” o “Reina del metal” u “Oro de la reina” ya que el mineral extraído en esta tierra era entregado a la esposa del Inca, la Coya. De lo que se refiere a la cultura Inca y su paso por Andacollo solamente se puede hablar de una influencia no de un dominio ya que ésta no se extendió por más de 50 años, sólo y desde el momento de la Conquista y primera repoblación de la ciudad de La Serena datan las primeras noticias históricas del lugar.